Desde 1997, Porsche ha apoyado a jóvenes talentos para que se conviertan en pilotos profesionales a través de un programa de aprendizaje. Timo Bernhard, Marc Lieb y Earl Bamber son tres ejemplos de pilotos de éxito que, al margen de sus títulos de campeón del mundo o de sus victorias en Le Mans, tienen algo en común: perfeccionaron sus habilidades en el programa Porsche Júnior.
Tradicionalmente, la Porsche Mobil 1 Supercup ha sido una competición de jóvenes donde los pilotos seleccionados por Porsche pueden poner a prueba sus habilidades. Esta copa internacional monomarca se disputa en grandes premios de Fórmula 1 y se considera como uno de los campeonatos más disputados del mundo. Durante los últimos 25 años, la Supercup ha sido el entorno perfecto para esta iniciativa con pilotos jóvenes. Como nuevo miembro del programa, Laurin Heinrich iniciará su primera temporada como Porsche Júnior durante el Gran Premio de Emilia Romagna, en Imola, el 24 de abril. Se ha confirmado que el alemán de 20 años pilotará el 911 GT3 Cup, generación 992, del equipo Nebulus Racing by Huber.
Porsche concede gran importancia a la promoción de jóvenes talentos en el automovilismo. Entre ellos han estado los alemanes Dirk Müller y Marc Basseng, primeros en completar el programa de formación del fabricante de automóviles deportivos, en 1997. Hasta la fecha, les han seguido otros 25 pilotos, para quienes esta iniciativa ha resultado decisiva en su desarrollo deportivo y personal. Todos ellos la utilizaron como trampolín hacia una exitosa carrera profesional en el mundo del motor. Los alemanes Timo Bernhard (Porsche Júnior de 2000 a 2001), Marc Lieb (2000 a 2002) y el neozelandés Earl Bamber (2014) son ejemplos destacados. Los tres han ganado las legendarias 24 Horas de Le Mans y han conseguido títulos en el Campeonato del Mundo de Resistencia FIA (WEC) al menos una vez con el Porsche 919 Hybrid.
Más recientemente, dos jóvenes de la actual lista de pilotos oficiales han triunfado en la primera prueba del campeonato IMSA de este año: el francés Mathieu Jaminet (Porsche Júnior 2016) y el australiano Matt Campbell (2017) se impusieron en las 24 Horas de Daytona con el Porsche 911 GT3 R, a finales de enero, dentro de la disputada categoría GTD-Pro. Este resultado es otro ejemplo de cómo el programa internacional de desarrollo de jóvenes de Porsche Motorsport ha sido una plataforma de lanzamiento para una exitosa carrera en el automovilismo durante 25 años.
Este año, dos de sus compañeros seguirán sus pasos en el DTM: compitiendo para el equipo 75 Bernhard, el piloto oficial austriaco Thomas Preining (Porsche Júnior 2017 a 2018) se sube a un 911 GT3 R, mientras que el noruego Dennis Olsen (2016 a 2017) se pone al volante de uno de los dos 911 GT3 de SSR Performance.
Laurin Heinrich, Porsche Júnior 2022
Laurin Heinrich es la última incorporación a este programa de formación de Porsche. A finales del año pasado, el joven de 20 años se impuso a once competidores internacionales durante una selección de tres días en el circuito Motorland Aragón. Ya había tenido una actuación impresionante en la Supercup de 2021, donde terminó cuarto de la general y fue el mejor debutante. Ahora, su objetivo es conseguir el título con Nebulus Racing by Huber para demostrar su valía y ganarse un posible ascenso al equipo oficial.
«La competencia en la Porsche Mobil 1 Supercup volverá a ser feroz en 2022», subraya Heinrich. «En Huber Racing puedo aprovechar las experiencias del año pasado. La relación no empieza de cero, todos nos conocemos y el ambiente es bueno. Aunque el equipo solo ha disputado una temporada completa de la Supercup, el año pasado, logramos ser los mejores debutantes. Queremos progresar aún más y ganar la Supercup en 2022».
Este año, el nuevo piloto Júnior recibirá una contribución de 225.000 euros para la temporada de la Porsche Mobil 1 Supercup. El programa sigue un enfoque holístico y cubre todos los aspectos de una carrera profesional en el automovilismo. Incluye, por ejemplo, el mismo apoyo de medicina deportiva y formación científica de la Universidad de Potsdam que se ofrece a los pilotos oficiales. La formación mental y los seminarios sobre medios de comunicación, así como los compromisos de relaciones públicas y las actividades de marketing, completan los estudios para convertirse en un piloto de carreras profesional.
«No basta con tener un gran talento al volante y tiempos de vuelta rápidos, un Júnior de Porsche debe tener también otros puntos fuertes, como saber tratar con confianza a los medios de comunicación y trabajar profesionalmente con un equipo», explica Sascha Maassen. Desde 2012, el antiguo piloto oficial de Porsche ha estado apoyando a los jóvenes como preparador en la Supercup. «Durante el proceso de selección anual, un jurado competente decide qué piloto tiene el mejor conjunto de cualidades y muestra el mayor potencial de desarrollo».